Las vacunas infantiles en forma de parches podrían ser entregadas por correo pronto después de que un ensayo encontrara que son tan efectivas como las tradicionalmente administradas por inyección.
El ensayo histórico encontró que los parches, similares a las curitas, pueden penetrar la piel sin dolor y fueron igual de efectivos que las inyecciones convencionales contra el sarampión y la rubéola.
Los expertos esperan que los prometedores resultados del ensayo puedan ofrecer una alternativa a la vacuna con aguja y jeringa.
Dijeron que esto podría animar a los padres a vacunar a sus hijos y eventualmente prevenir brotes como los vistos este año en las West Midlands y Londres. Según la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, ha habido 733 casos confirmados de sarampión desde octubre del año pasado, con un 15 por ciento de ellos en Londres.
Conocida como parches de microarray, la vacuna se administra utilizando un grupo de proyecciones microscópicas que penetran la capa superior de la piel en lugar de una inyección convencional con una sola aguja más grande.
Las vacunas tradicionales deben ser administradas por un profesional capacitado y a menudo deben mantenerse refrigeradas. Sin embargo, los parches no necesitan refrigeración y requieren un entrenamiento mínimo para su administración, lo que significa que pueden ser entregados en áreas remotas de todo el mundo con relativa facilidad.
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El ensayo involucró a 120 bebés de nueve a diez meses, 120 niños pequeños de entre 15 y 18 meses y 45 adultos de 18 a 40 años en Gambia.
La investigación, publicada en The Lancet, encontró que el parche produjo una fuerte respuesta inmune, comparable a la proporcionada por una inyección con aguja. Más del 90 por ciento de los bebés estaban protegidos contra el sarampión y todos estaban protegidos contra la rubéola después de una sola dosis.
Y, a diferencia de las vacunas tradicionales, los parches no presentan riesgo de lesiones por pinchazos o transmisión de infecciones como el VIH y la hepatitis. El ensayo fue liderado por investigadores de la Unidad de Investigación Médica de Gambia en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.
El parche fue desarrollado por Micron Biomedical, que patrocinó el ensayo y fue financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates.
Se espera que los parches puedan animar a más padres en el Reino Unido a vacunar a sus hijos, ya que es significativamente más fácil y menos doloroso que la opción actual.
El profesor Ed Clarke, pediatra y coautor del estudio, dijo: “Aunque es temprano, estos son resultados extremadamente prometedores, que han generado mucha emoción. Demuestran por primera vez que las vacunas se pueden administrar de manera segura y efectiva a bebés y niños pequeños utilizando la tecnología de parches de microarray. Las vacunas contra el sarampión son la máxima prioridad para su entrega utilizando este enfoque, pero ahora también es realista la entrega de otras vacunas utilizando parches de microarray. Estén atentos”.
Los investigadores han dicho que se están planeando ensayos más grandes de parches de microarray con grupos ampliamente representativos de niños y bebés.